FECHA:18/06/02

Cruzar el Atlántico: un reto cumplido

Álvaro de Marichalar logra por primera vez en la historia la hazaña de cruzar el océano Atlántico en solitario a bordo de una moto de agua Bombardier XP, lo que supone un record mundial para la navegación

La aventura del navegante Álvaro de Marichalar que lleva por nombre Atlántik 2002 ha supuesto más de 5.500 millas náuticas recorridas a bordo de una moto de agua  XP Bombardier enfrentándose a toda clase de contratiempos y a una lucha constante contra la naturaleza.

Con la santa misa en Fiumicino (Italia) el pasado 23 de febrero que dio inicio a la aventura, el piloto navarro se ha enfrentado a lo largo de cuatro meses a un duro temporal de fuertes vientos, bajísimas temperaturas, olas de 4 metros y poca visibilidad que han retrasado parte de las previsiones iniciales. El primer logro de la travesía fue a mediados de  abril al superar las 3.000 millas náuticas que separan las Islas Canarias de la isla americana de Antigua consiguiendo batir una nueva marca mundial de distancia navegada en solitario.

La entrada al océano atlántico tuvo lugar a principios de mayo y su encrucijada supuso veinte días de navegación hasta divisar tierras americanas. “Avistar tierra ha sido indescriptible. Enseguida he intentado hacer realidad otro sueño: durante mucho tiempo pensé que cuando viera las primeras costas americanas, tomaría una bandera de España en mis manos y navegaría hacia tierra firme. Lo he hecho y me he sentido emocionado” comentó el piloto.

Durante los cuatro meses de expedición la distancia media diaria navegada fue de 120 millas náuticas (230 Km.) con etapas de una duración media de 12 horas diarias, excepto la etapa más larga en el tramo Ibiza-Almería de 315 millas (600 Km) y 30 horas de duración.

Altantik 2002 ha resultado ser una de las pruebas más exigentes de resistencia tanto para el piloto como para la pequeña embarcación Bombardier XP que ha conseguido demostrar una vez más disponer de altas prestaciones: “Las olas son increíbles. Hay un momento donde vienen tres enormes. Son olas gigantescas que imponen. Da verdadero miedo estar ahí a bordo de un barquito tan pequeño, pero que cuando responde puede con casi todo.

Tiene mucha potencia para el peso que desplaza y eso la convierte en una embarcación que aguanta todo tipo de mar. Lo único que hay que tener es confianza en la respuesta que tripulante y embarcación pueden dar en cada momento” escribió el navegante en el tramo atlántico.

La expedición iniciada en Roma está a punto de finalizar. Tras superar las localizaciones de Roma, Nápoles, Capri, Sicilia, Túnez, Argel, Oran, Gibraltar, Sevilla, Ceuta, Tánger, Casablanca, Añadir, Canarias, Océano atlántico, Antigua, Puerto Rico y República Dominicana, Álvaro de Marichalar tiene previsto llegar a la ciudad de Miami en los Estados Unidos el próximo sábado 22 de junio dando por finalizado su objetivo.

Para celebrar el logro del navegante español, la compañía Bombardier Inc preparará una recepción el mismo día de la llegada a Miami. Por la noche los tripulantes de Atlántik 2002 lo celebrarán con una cena en la que asistirán  representantes de la Casa Real Española, cónsules y patrocinadores que han hecho posible esta aventura.

Para más información podéis visitar la web www.atlantik2002.com donde encontraréis un seguimiento detallado de la expedición.