Azimut 105: el placer de vivir la mar

Megayate de los pies a la cabeza, el AZ-105 está totalmente en la línea de los grandes barcos del astillero de Viareggio, ofrece un aspecto inmejorable gracias al saber hacer de Stefano Righini que diseñó la carena y sus cubiertas y de Carlo Galeazzi que ha logrado dos distribuciones de interior complementarias, ambas decoradas de forma exquisita..

El barco de semidesplazamiento está fabricado en fibra de vidrio y ofrece en sus casi 32 metros de eslora dos cubiertas con un amplio pilot house protegido por un extenso techo rígido en que van instaladas antenas y domos de comunicaciones. El casco ofrece ventanales de forma trapezoidal en su superestructura que inundan de luz los camarotes principales. Más a proa se han diseñado otros ojos de buey alargados que también dan luz a las demás estancias.

Su fuerte motorización de 2 x 2000cv así como las transmisiones V-Drive equipadas con hélices de 4 palas permiten al AZ-105 alcanzar cómodas velocidades de crucero en torno a los 25 nudos.

Azimut 105: Vida al aire libre

Al subir al Flybridge descubrimos un nuevo yate que ofrece una maravillosa vista panorámica abierta en 360º. Todo es sorprendentemente amplio y agradable. En la parte frontal se encuentra el puesto de gobierno del fly con un amplio asiento de tres plazas situado a babor. Al otro lado de la escalera de acceso al fly está dispuesto otro asiendo y detrás de ellos se encuentra una barra bar con dos altos taburetes, una amplia barbacoa y un sofá en forma de “L” alrededor de una nueva mesa de comedor que puede dar cabida de forma cómoda a ocho comensales.

A popa del fly se encuentra la zona “dolche vita” con un completo jacuzzy y amplios solariums que pueden extenderse hasta el comedor por si todo el mundo quiere disfrutar del sol. Las colchonetas y respaldos están tapizados en tonos claros y muy acordes con el resto de la decoración del yate. Por la noche nos sorprenderá una grata decoración creada con focos indirectos que iluminan el suelo claro y ofrecen un aspecto cálido y acogedor.

En la parte de popa y a estribor está dispuesta una grúa que se integra con los demás elementos gracias a su carenado, y con la que poder subir a bordo o botar los barcos auxiliares que están estibados en el garaje, como son la embarcación semirrígida o una motor de agua.

La decoración del Azimut 105

El salón está decorado con maderas de cerezo y tonos que combinan los beiges claros siempre acogedores en la moqueta de todo el suelo con otros tonos más oscuros utilizados en diferentes sofás tapizados en pieles de gran calidad. Frente a la zona de estar se encuentra una gran pantalla de plasma que puede ser escondida mediante un mecanismo motorizado en el mueble de estribor. La decoración del techo permite crear dos ambientes en el salón diferenciando el comedor de la parte dedicada al salón. La iluminación del techo está realizada mediante un agradable sistema de luz difusa que combina un elegante trabajo de ebanistería también en tonos rojizos de madera de cerezo bordeado por un fileteado también en cerezo que enmarca este importante elemento de iluminación. Los ventanales laterales del salón están equipados con largos estores ajustables con lo que podemos ajustar el nivel de iluminación natural exterior a voluntad.

Más adelante alcanzamos la zona del puesto de gobierno que goza de todos los adelantos tecnológicos, panelados en distintos instrumentos electrónicos alrededor del puesto de mandos. A babor y en un plano algo más elevado está dispuesta una amplia mesa y un cómodo sofá en donde poder estudiar la navegación o trabajar con un ordenador portátil mientras controlamos todos los aspectos de la navegación a través de los tres amplios ventanales frontales.

Alrededor del timón encontramos los mandos de los motores y el de la hélice de proa, así como las diferentes pantallas para el radar, charplotter y circuitos cerrados de televisión que nos permiten vigilar la sala de máquinas en donde están montados los dos motores MTU y los diferentes equipamientos como son los potentes generadores, la planta desaladora, así como bombas, cargadores, inversores de corriente. Todo se puede controlar desde una pantalla de tipo táctil que permite ajustar el funcionamiento de los diferentes sistemas paso a paso, organizado en diferentes menús informáticos. Los flaps estabilizadores pueden ser controlados de forma manual o mediante un sistema automático que los ajustará en función de la velocidad de navegación.

El armador tiene la posibilidad de solicitar el camarote principal en la cubierta interior o en la zona de proa de la cubierta principal quedando más elevado y con enormes ventanales de más de 180 grados. En ambos casos el salón es muy grande y ofrece distintos ambientes para ver la televisión, o para crear un centro de estar o para escuchar el equipo de música, o para charlar con amigos ante un agradable aparador.

En la zona central aparece una generosa escalera que da acceso a los camarotes y la amplia cocina equipada de forma muy elegante y funcional, naturalmente con todos los elementos de cocina que pudiéramos imaginar. En ella se combinan las maderas de cerezo con un suelo también en tarima de madera más claro que hace destacar las encimeras diseñadas en una amplia “U” en donde están dispuestos todos los útiles culinarios. Las neveras son enormes y están divididas en varios bloques uno de ellos con puerta de cristal que permite observar el interior sin necesidad de abrir sus puertas. La mesa de comedor de la cocina está equipado con un televisor plano desde el que se puede controlar por circuito cerrado las diferentes zonas del yate. Desde esta zona accedemos a dos nuevas cabinas dedicadas a la marinería.

Todas las cabinas con independencia de su tamaño ofrecen todos los lujos que pudiéramos imaginar. El camarote principal del armador goza de una muy amplia cama doble frente a un televisor de plasma situado al lado de la zona de vestidores quedando a babor. Todos las camas del barco esconden armarios que aprovechan estos volúmenes para estibar las ropas y enseres de cada invitado a bordo. Cada camarote cuenta con un baño independiente con una amplia ducha, salvo el del armador que además lleva instalado un jacuzzy desde el que podemos ver cómodamente la televisión.

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