Lagoon 420 Hybrid

"Lagoon 420: La revolución eléctrica ya está aquí"

Mediante su motorización eléctrica se consiguen mejoras y formas de navegación sumamente novedosas. El nuevo Lagoon 420 sustituye al 410 ofreciendo una habitabilidad jamás conseguida en un 42 pies.

Diseño totalmente Lagoon, con el típico “rouf” panorámico y vertical, y un poco más anguloso que en barcos anteriores, ofreciendo una visibilidad excepcional desde el salón. Sus ventanas pueden permanecer abiertas incluso con lluvia sin miedo a que entre el agua garantizando la ventilación incluso en un chaparrón de verano. Los cascos son un poco más largos un con más volumen que en el 410 lo cual se hace notar en la habitabilidad de los camarote. El desplazamiento es generoso, pasando de las 14 toneladas y permitiendo cargar muchos cientos de kilos más para preparar los cruceros oceánicos más largos.

Hay un buen número de mejoras constructivas respecto a los anteriores Lagoon, como son la utilización de contramoldes estructurales al más puro estilo Bénéteau, o las nuevas resinas vinylester con las que se garantiza la solución antiosmosis. Pero el verdadero adelanto proviene de su motorización: Propulsión eléctrica mediante un parque de baterías de 72 voltios alimentadas mediante un generador diesel que produce toda la energía eléctrica que se consume a bordo, incluyendo la propulsión, naturalmente! De esta manera no hay problema con los amperios. Podremos disponer de microondas, neveras y congeladores, aire acondicionado y en general chupar watios sin cortarnos un pelo, ya que el generador de 8 ó 11 Kwatios es capaz de alimentar lo que queramos estando fondeados.

El mantenimiento de los motores eléctricos es prácticamente nulo (20.000 horas de uso) por lo que solamente debemos preocuparnos del mantenimiento del generador, que bien cuidado puede durar miles de horas sin más que hacer los cambios de filtros y aceites pertinentes. 

Pero cuando lo utilice por primera se sorprenderá por el absoluto silencio. Silencio y ausencia total de vibraciones. De hecho hay que acostumbrarse pues al no oír nada no tendremos referencias sonoras de la potencia a la que vamos. Durante las maniobras la respuesta es inmediata. Todo va suave, ya que no existen embragues bruscos, y la progresividad es impresionante. De hecho, se puede hacer funcionar la hélice a solo 10 vueltas por minuto! Es una gozada salir sin hacer el más mínimo suspiro. La gente en los pantalanes no se lo cree.

La inversión de marcha es absolutamente inmediata, sin necesidad de pasar por el punto muerto clásico ni esperar a que las revoluciones del motor caigan. Esto representa un argumento más de seguridad ya que podemos utilizar los motores como sistema de frenado brutal. Se han hecho pruebas navegando a unos 4 nudos y metiendo el motor a máxima marcha atrás para detener el Lagoon en menos de una eslora de distancia!. La aceleración es inmediata ya que los motores eléctricos generan un potente par motor desde cero revoluciones, y se han montado unas potentes hélices tripalas capaces de transferir con efectividad la potencia de los motores.

En modo 5 crucero, se consiguen velocidades a motor de 7 nudos y a máxima potencia (solo es posible mantenerla una hora y media) casi los 8 nudos medidos con GPS. En modo 4 limitado al 60%, la velocidad a motor es de 6,6 nudos y dispondremos también de 220 voltios a bordo cargándose además las baterías de 12 voltios de servicios. Cuando navegamos a vela a unos 7 nudos, y es necesario recargar baterías, perderemos 0,7 nudos debido al freno que ejerce la hélice en el arrastre de los motores que en estos momentos estarán generando energía en vez de consumirla.

En consumos, el sistema es magnífico, ya que las pruebas de astillero aseguran que el equivalente con dos sail drive diesel de 50 CVs consumen entre dos y tres veces más!. Lo cual permite doblar la autonomía o llevar la mitad de peso en gasoil. Cuando arranca el generador de forma automática el ruido es siempre muy moderado y mucho más bajo que el de unos motores tradicionales. El escape de humos mediante sistema gas/agua es tan silencioso que cuesta escucharlo.  Cuando pasamos del lento ralentí de puerto a potencia de crucero, notamos nuevamente una respuesta inmediata y una notable aceleración.

A vela el Lagoon 420 es irreprochable ya que hereda toda la experiencia de su antecesor el 410. Todas las drizar y cabos llegan al puesto de pilotaje en donde se han dispuesto stoppers y 4 winches de los cuales uno de ellos es eléctrico en la versión estándar. Lo tendremos todo a mano, pero al concentrarse todo en un mismo lugar debemos cuidar el orden de los cabos si no queremos encontrarnos con una pila de cabos amontonados.

A partir de solo 10 nudos de viento aparente ya nos desplazamos a cerca de 5 nudos y con 15 nudos de viento podremos hacer 7 de GPS!. El timón es algo insensible como en la mayoría de los catamaranes pero la maniobrabilidad es muy buena. El Lagoon 420 se defiende bien en las olas lo cual favorece la comodidad en navegación.

Espacio. Más espacio

Si ya de por sí los catas ofrecen unas estancias muy espaciosas, en el Lagoon 420 se sentirá sorprendido. En solo 12,6 metros de eslora se ha conseguido una habitabilidad sorprendente y con algo más de 2 metros de altura!.

En el dinete en “U” del salón se pueden sentar hasta 8 personas y alrededor todos son vistas panorámicas y espacio despejado. El asiento sobreelevado del puesto de gobierno está pensado para dos pilotos. Al bajar a los camarotes de los patines también tendremos una altura perfecta de casi 2 metros y mucha luz. El camarote principal mide 6,1 metros de longitud, a lo cual debemos añadir el importante cuarto de baño con ducha separada.

Más información: "Probamos la propulsión eléctrica: Lagoon 420 Hybrid"

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